Una empresa familiar que conecta el campo de Pavía, Italia, con el mundo entero. Sus productos son el resultado de un control constante y cuidadoso. La marca Okomesan solo se otorga a los arroces que reflejan todas las características necesarias.
Todo empezó cuando hace más de veinte años, un amigo japonés dueño de un restaurante le pidió a Hajime Morimoto un arroz apto para la cocina japonesa que fuera más fácil de encontrar, kilómetro cero, más barato y libre de transgénicos (a diferencia del importado de América que en ese momento monopolizaba el mercado). Gracias a la zona en la que nació la empresa y al conocimiento que han ido adquiriendo a través de la investigación, han llegado a identificar el arroz apto para la cocina japonesa.
Inscríbete y recibe todas nuestras novedades