A l’Olivier es una empresa fundada por Eugene Pompelin en París en el año 1822. Sus inicios son una pequeña tienda en el barrio de “Le Marais” en París dedicada a vender los mejores Aceites de la Provenza a los ricos Parisinos. Año tras año A l’Olivier consiguió una clientela fiel que visitaba su tienda no solo para comprar los mejores aceites sino para comprar productos delicatessen que no encontraban en otras tiendas.
En 1985 el nuevo propietario decidió crear una fábrica en el sur de Francia donde producir los aceites aromatizados y demás especialidades como vinagres y mostazas.
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